Todo cambia, todo cambia De la noche a la mañana, Un día estás, más tarde no Y todo cambia. No se abren más sus ojos, No se escucha más su voz, Pero si ayer la ví reír, Imposible!, todo cambia. Se apagó su sonrisa, Se llevó el aire su luz, De aquí hasta siempre su ausencia, No la volverás a encontrar. Todo cambia, todo cambia De la noche a la mañana, Una noche estás, una mañana no Y todo cambia.
Sus recuerdos atrapados, Son lo único que queda, Nutrirás tu amor con eso, Nada más a qué aferrar.
Qué la esperaba al otro lado? Qué sentiría al caer, Decisiones o accidentes, Que no se pueden devolver.
Todo cambia, todo cambia, Para siempre su mirada, Atrapada en esas fotos, Quién lo iba a imaginar.
Dónde y cómo estará ahora? La tranquilidad se fue, Al viento entregar mil suspiros, Deseando verla volver.
Con la calma aceptarás, Entre rabia, dolor tal vez, Que se ha ido para siempre, Que el adiós es eterno esta vez.
Vos lo considerás traición. Yo lo veo como salvación. De buena o mala manera me libré de vos. Como dicen por ahí, tras de ladrón, bufón.
El cielo no quiso entender, sabía que era lo mejor alejarme de vos. Difícil de aceptar, a veces los ojos engañan al corazón y la mente se hace la loca para aceptar perder.
Vos lo considerás traición. Después de 6 o 14 años de amor y amistad incondicional, tus muestras de odio no se ven coherentes pero no saben tan mal.
Soltá tu ejército, dejá salir tu ira, sacá tu herida a respirar. Yo, sentada en mi trono esperaré el momento preciso para atacar. Atacaré con mi olvido, es la mejor venganza que puedo otorgar, mi indiferencia y eliminar tus huellas siempre serán lo que más te dolerá, nunca podrás aceptar cómo alguien que te levantó de las cenizas y te enseñó a caminar, pudo abrir los ojos para dejarte atrás.
Así me despido, aceptar tu derrota te dolerá, algún día despertarás y sabrás, que lo que consideraste traición no era más que una patada de realidad.
Ahí solo, en tu mundito material, mirarás al cielo y me verás volar, con las alas abiertas, me envidiarás y no tendrás más remedio que llorar.
Vos lo considerás traición, yo lo veo como salvación. Gracias al caos, jamás volví a saber de vos...
Amarga obsesión cuando no estás a mi lado, dulce sensación de satisfacción si tu sonrisa me hechiza. Busco en tus ojos si de verdad sentís amor, y en un viaje sin regreso me pierdo nadando entre colores, acompañada de estrellas que se incrustan en mi deseo de tenerte.
Lágrimas se escapan de mí al sentirte tan lejos que tu energía no dibuja mi sonrisa, despierto forzada, Morfeo me castiga por no estar con vos, y el Sol se rehúsa a saludarme por no seguir mi corazón, sino la intención de aprender a vivir sin tu presencia.
En sueños no me abandonás, siempre llegás a torturarme con tu figura perfecta y tus labios intocables, mordiendo suavemente una piel que se estremece cuando el fuego de tu mente se hace sentir.
Con vos se fueron los despertares alegres, las sonrisas sinceras, los ojos brillantes y los labios palpitantes. Conmigo se quedó la mente condenada a no dejarte, el corazón que se acelera con tu nombre y el martirio que es no tocarte más que en sueños, obligándome a despertar en el paraíso sin vos.