Bajate de esa nube, reaccioná.
Hay razones por las cuales no tenés una expresión tranquila en tu cara, hay razones por las cuales arrugás la frente, bajás las cejas y en tus labios no se asoma una sonrisa ni por que la dibujaran con marcador indeleble.
Bajate de esa nube, abrí los ojos.
Despertá y aceptá las reglas del juego que estás jugando, hay otros jugadores que fácilmente son capaces de volarte la cabeza y dejarte por fuera.
Tenés que tener paciencia, el juego te gusta más que cualquier cosa y en este momento no vas a conseguir lo que querés, relajate un poquito, respirá profundo y tranquilizate.
Cambiá tu adicción por otra cosa, tratá de canalizar tu energía en otras cosas, ocupá tu mente y entretenete...
¡No le des más mente a lo que no podés cambiar!
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